sábado, 29 de enero de 2011

Proyecto...

Pasan las horas. Los días.
Pasan semanas y meses,
y mis pasos vuelven sin descanso
a ese lugar que solo yo concibo.
Mi realidad deambula
en torno a un imposible.
Algo que nunca existirá,
fuera de los límites de mi cabeza.

lunes, 24 de enero de 2011

Melancolía...

 Una canción, un olor, una imagen. Últimamente todo sirve para generar un remolino de sensaciones, que se cuela en mis adentros, y agrieta el fondo de mi ser. Mis ojos se pierden en la inmensidad de la nada. El frío me envuelve y me paraliza. Helado, e incapaz de pestañear  mis corneas se secan. La visión se nubla. Vuelven los recuerdos. Escalofríos sacuden mi cuerpo, que parece gritar en silencio. Cada pelo responde a la llamada, pero es la nuca la que se lleva la peor parte. La habitación se vacía. La seguridad y la fuerza se esfuman. En un banal intento por rehacerme, aprieto los puños, y muerdo el vacío. Siento los dedos helados en la palma de la mano. Los dientes rechinan. Los ojos se humedecen.

 Vuelven los pestañeos, y con ellos el aire. Sigo sintiendo el frío, pero ya no importa. El plano físico ya es secundario. Estoy demasiado ocupado siendo miserable. Me nutro de ello. Por un momento me despojo de mi eterno amor propio. Es necesario. Con él, no podría dejar de quererme. No podría quejarme. No podría culparme. No podría vivir de mis lamentos. No podría ser feliz.

A veces me odio tanto...

Calor...

 En mi mundo hay silencio.
Las sombras son mi abrigo.
En mi mundo hay penas,
lamentos y quejidos.
No pido que las entiendas.
No pretendo compartirlo.
Mi mundo no esta a tu lado
Mi mundo, no es contigo.
Solo quiero que me abraces.
Que me protejas del frío,
por que la noche me asusta.
Quédate. Duerme conmigo...

sábado, 15 de enero de 2011

Fuego y lluvia...

Mi futuro me espera. Mi camino me aleja de mis raíces. Pero siempre seguirás ahí. En cada decisión. En cada paso. Sin quererlo, sobre tu delantal me fraguaste, y me hiciste quien soy.

Donde vaya, te llevaré conmigo. Y si me caigo serán tus palabras, las que me levanten. Las llevo tatuadas en el pecho. Tu apoyo y tu cariño, grabado a fuego. Y cuando lleguemos, allá donde mi maldita ambición nos lleve, sabré que ha sido gracias a ti...

Por siempre,
gracias...

viernes, 14 de enero de 2011

Actitud contemplativa...

El sol sobre la piel.
Contraste
de calor y viento de proa.
Vaivén.
La blancura del blanco
entra a raudales,
violando mis ojos desnudos.
La frescura de la inocuidad
inunda mis pulmones.
La tensión de la superficie,
de un mar finito
me sobrecoge.
Todo parece abarcable.

No estoy en la escena.
Soy parte de ella.
Formo un todo con cuanto me rodea.
El espacio no se entendería
si yo no estuviese ahí,
contemplándolo.
Soy observador
y soy objeto.

Desde un rincón,
todo gira.

Me siento en paz.

Al fondo
el ruido de una discusión.

Los oigo, en la distancia.
No me interesa.
Pero también ellos conforman este momento.
Ellos
y el bramido del mar.

El viento en la cara.
El suave chapoteo de los patines
rasgando el agua.
Destellos que se pierden en cada ola.
Las nubes estampadas
magnifican la arquitectura de los "kos".

Huele a sol.
Huele a calma.

3-12-10 Tailandia

domingo, 9 de enero de 2011

Heridas...

Palabras
que una vez envenenaron el ánimo,
se pudren ahora
en un rincón de la memoria.
Recuerdos empañados por la lluvia,
se esconden
en los pliegues que afloran
cuando nos quedamos solos.

Todo puede ser
objeto de interpretación.
Todo, salvo los sentimientos
que una vez vivimos.
Tan puros,
tan nuestros.
No hay perspectiva que justifique
el dolor que nunca se fue.
No hay razones que expliquen
una herida que nunca cerró.
Ya no hay cabida para la lógica.

En las espinas
que el tiempo enquistó,
solo queda dolor.
Déjalas.
No las toques ya.
Si.
Vivo con ellas.
Pero nunca dejaron de doler.
Déjalas, te digo...

Somos el resultado
de los sentimientos vividos.
Sobran las excusas...

viernes, 7 de enero de 2011

Oquedades...

Insoportable levedad,
que me eleva y me zarandea,
dándome una perspectiva ajena.
Exterior.
Sin mi.
Insoportable vacío
el que dejo tras mi estela,
apenas
imperceptible para el resto.

martes, 4 de enero de 2011

Desvelo...

Espejos contrastados.
Una realidad pesada y etérea
se abre ante mi,
en silencio.

Lo vivido y lo soñado
se funden
en un mismo ser,
dando paso
a la más absoluta levedad.

Levedad
Levedad.
Levedad al percibir
los lazos que me atan
a este mundo.

¿Como pueden unos lazos tan débiles pesar tanto?

Vanalidad de cada sueño...
De lo deseado, lo rechazado, y lo vivido....