martes, 19 de enero de 2010

De la prosa al verso...

Sin ser consciente, mi cabeza ha encontrado una forma de dejar salir mis pensamientos, sin adulterarlos. Sin que tengan que ser procesados, antes de ver la luz. Sacrificando claridad y exposición argumental, los versos me permiten una total libertad de plasmación, sin la manipulación a la que mi mente sometía antaño a todo cuanto escribía. Con ellos me siento más cerca del concepto de ilustración renacentista, donde el hombre dominaba todas las disciplinas, y las usaba a su antojo.

Paso a paso. El siguiente: recuperar mi trazo...

1 comentario:

Anónimo dijo...

aayyy me encantaaaaa!!!!