No se si son los aspectos de mi vida los que poco a poco se van recolocando, o simplemente soy yo el que empieza a ver las cosas desde el punto de vista adecuado. Sea como sea, esto se endereza. Ya no estoy tan pendiente del futuro a corto plazo, lo que me permite disfrutar del presente. Valorar cada momento, sin que para ello tenga que hacer nada en especial. El simple hecho de poder disfrutar de la soledad que me rodea, es algo que no tiene precio. Saber apreciar cosas que antes no solo no valoraba, sino que me disgustaban, hacen que el día a día sea mucho mas llevadero.
Sin duda voy por el buen camino...
domingo, 21 de septiembre de 2008
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